Una vez que se cerraron los locales ubicados en la calle 46 poniente en donde se vendían autopartes robadas, el gobierno de la ciudad ha detectado que están utilizando como fachada los talleres mecánicos, para realizar esta actividad, por lo que se está convirtiendo en un efecto “cucaracha”, aseguró el presidente municipal Eduardo Rivera Pérez.
En este sentido, destacó que en su administración seguirán con los operativos de normatividad y gobernación para detectar este tipo de negocios, pues sostuvo que no va a permitir que esto se convierta en un efecto cucaracha.
Lo anterior a que este lunes un grupo de habitantes de la junta auxiliar de La Resurrección se manifestaron señalando que están en contra de la clausura de locales, pues por usos y costumbres no paga impuestos.
Ante esto, indicó que respeta las creencias que tienen, por ello están en toda la disposición de diálogo, por tanto este lunes fueron atendidos y escuchados por la secretaría de Gobernación.
El alcalde señaló que se les explicó al grupo de inconformes que existe una ley y que el gobierno municipal debe actuar en el territorio, por lo cual si hay denuncias ciudadanas de algunos negocios en algunas juntas auxiliares, donde hay reportes que se están comercializando autopartes robadas, el gobierno no se “quedará de brazos cruzados”.
Rivera Pérez aseguró que su administración actuará ante esta situación para evitar que exista un efecto cucaracha por las acciones que se han hecho en la calle 46 poniente y que esto se complique en una determinada junta auxiliar que se dedique a la venta de estos artículos de procedencia ilícita.
