Iván Tirzo
En el proceso de conformación del equipo de campaña de la candidata de la alianza “Por Puebla al Frente”, Martha Érika Alonso, hay personajes a los que deben cerrar las puertas, para no dejarlos pasar.
Militantes de los partidos que se sumaron a la coalición del PAN alzarán la voz en futuras reuniones, para plantear que hay funcionarios y colaboradores de primer nivel del sexenio de Rafael Moreno Valle que son un riesgo para la imagen de la señora.
La lista es amplia, pero hay dos que de forma particular incomodan a líderes partidistas, ellos son Alejandro Torres Palmer y Roberto Moya.
A ellos ya los vieron sostener acercamientos con el grupo de Alonso Hidalgo, para mostrar su interés de sumarse a la operatividad de la campaña.
Entre los militantes con peso en la toma de decisiones en el PRD, PCP, MC, PSI y del PAN hay preocupación porque salgan a la luz los negociazos que hicieron en la entidad en el periodo 2011-2017.
Temen que Morena o el PRI indague a profundidad el historial de estos personajes y eso provoque un socavón en la imagen de la candidata de la coalición.
En los pasillos de las oficinas partidistas se comenta que Roberto Moya ha sido uno de los más beneficiados con la instalación de la planta Audi en el municipio de San José Chiapa, porque hay varios de sus allegados que curiosamente se establecieron con negocios en la hoy llamada Ciudad Modelo.
Las sospechas apuntan a que el ex secretario estatal usó prestanombres para beneficiarse.
De Alejandro Torres se sabe que actualmente existe una queja en su contra en la Secretaría de la Contraloría -de la que curiosamente él fue el titular en el sexenio pasado- por una serie de irregularidades administrativas, como dejar sin papelería a diferentes dependencias en el cambio de gobierno en 2017.
Estos dos personajes además son señalados de estar detrás de las compañías que operan las líneas 1 y 2 de la RUTA (Red Urbana de Transporte Articulado) y del Tren Turístico, con la complicidad de Mariana Navarrete quien fue la encargada de Carreteras de Cuota.
El 24 de enero de 2017 le di a conocer en esta columna que el día anterior un grupo de hombres armados y encapuchados tomaron el centro de control de la línea 2 de RUTA en la estación Margaritas.
El asalto se operó desde Carreteras de Cuota y desde la oficina de Torres para quitarle el control del manejo de las tarjetas a la empresa que tenía la concesión de dicha línea: Bus Rapid Transit de Puebla SAPI de C.V.
Esta compañía procedió por la vía legal,
porque sin licitación de por medio, Carreteras entregó la concesión a la empresa norteamericana XEROX Solutions de México.
Por estas razones y porque además ni poblanos son, es que no quieren a Alejandro y a Roberto cerca del equipo de la precandidata a la gubernatura, de quien es indiscutible que hoy encabeza las encuestas.