Bien hicieron los dirigentes estatales de Morena, PES y PT en dar marcha atrás en la designación de Martín Mirón López como candidato a alcalde de Palmar de Bravo, debido a que es tío del ex líder huachicolero, Jesús Martínez Mirón, alias El Kalimba.
Este ex líder huachicolero fue ejecutado en la ciudad de Puebla por presuntos problemas entre las bandas dedicadas al robo y distribución de combustible robado en la zona del Triángulo Rojo y su tío pretendía ser alcalde de Palmar de Bravo.
Raúl Barranco tuvo que recular y quitarle la candidatura que ya le había asignado el Partido Encuentro Social (PES) al tío de El Kalimba.
Un hecho muy grave que fue censurado por toda la clase política de la entidad debido a que implicaría abrir la puerta a personas relacionadas con criminales.
Sin duda que fue un grave error de Morena y en particular del PES que fue corregido casi de inmediato.
¿Y el PSI para cuándo?
Esa es la pregunta que sigue en espera de una respuesta.
Alejandro Martínez Fuentes fue registrado por el Partido Social de Integración (PSI) como su candidato a la presidencia municipal de Quecholac.
Alejandro Martínez es hermano de Antonio Martínez Fuentes, alías El Toñín, y quien es señalado como uno de los principales líderes de las bandas de huachicoleros.
Aunque el PAN intenta deslindarse de la postulación del PSI, en el corto plazo esa candidatura le pesará mucho a su candidata a la gubernatura porque será blanco de ataques porque el PSI es su aliado.
¿Qué necesidad hay de que vinculen a la candidata del PAN con un candidato severamente cuestionado en Quecholac?
Carlos Navarro, dirigente estatal del PSI, no le hace ningún favor a Martha Erika Alonso es dejar a Alejandro Martínez como el candidato de Quecholac.
Es un grave error que puede costar mucho no sólo en la campaña de la candidata del PAN, sino a la vida democrática del estado.
Es un tema de prioridad que debe tener una respuesta inmediata.
¿O por qué defiende tanto Carlos Navarro al hermano de El Toñín?
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