Melanie Isahmar Torres Melo/@Isahmar_Torres
El gobierno de Rafael Moreno Valle orquestó un desfalco al erario público de 359 millones de pesos a través de la realización de la obra del Teleférico, revelaron Carlos Figueroa Ibarra y David Méndez, voceros de la campaña del candidato de Morena a la gubernatura del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta.
En rueda de prensa, Carlos Figueroa reveló que el entonces gobernador del estado, Rafael Moreno Valle, su secretario de Finanzas y actual gobernador del estado, Antonio Gali Fayad, el entonces secretario de Contraloría, Eukid Castañón y el Secretario de Transportes, Bernardo Huerta, intentaron desaparecer los contratos originales de la obra inicial del Teleférico, en donde se destinan un total de 234 millones de pesos a una empresa suiza, que nunca realizó obra alguna.
El vocero detalló que ellos tuvieron acceso a los dos contratos que el gobierno de Rafael Moreno Valle signó con la empresa suiza Bartholet Maschinenbau, dos contratos en los que se establece su adjudicación directa en la realización de la obra del Teleférico, que en un inicio estaba contemplado para una longitud de 1.89 kilometros, de los Fuertes al Barrio del Artista.
Los contratos fueron firmados en agosto de 2012, y el gobierno poblano pagó a dicha empresa la cantidad total de 234 millones de pesos aún sin realizar la obra, posteriormente, y ante los problemas legales para la realización del proyecto, los contratos reales fueron sustituidos por órdenes de Eukid Castañón, según reveló David Méndez.
En este sentido, cabe la pena recordar que el gobierno morenovallista tuvo problemas legales para realizar el teleférico con las características iniciales debido a que no contaba con los permisos del INAH, y posteriormente las autoridades ordenaron la reconstrucción de la Casa del Torno por ser patrimonio Cultural de la Humanidad y la reubicación de la torre del teleférico, ocasionando cambios radicales en el proyecto.
La obra se redujo de 1.89 kilómetros a 655 metros, y ya no la realizó la empresa suiza, sino la denominada “CEMS”, que inició con un contrato de 143.4 millones de pesos, pero el costo total fue de 359 millones de pesos, es decir, 125 millones de pesos más que la obra original, aún cuando esta era tres veces más pequeña.
En este sentido, Carlos Figueroa señaló que se desconoce el paradero de los 234 millones de pesos que inicialmente se le pagaron a la empresa suiza, y sumado al sobrecosto de 125 millones de pesos de la obra final, dan como resultado un desfalco al erario de 359 millones de pesos.
Los voceros refirieron ya haber pasado esta información al área jurídica del partido para que se tomen las investigaciones correspondientes por la desaparición de contratos por parte de los servidores públicos, y se inicie una investigación con la empresa CEMS, pues 287 millones de pesos de los empleados en la obra provienen del Recurso Federal de Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas.
Así mismo, determinar el destino de las torres y cabinas que ya se habían adquirido para el proyecto inicial, el motivo para realizara obra por adjudicación directa, y determinar dónde quedó el dinero pagado a las empresas suizas.
