Melanie Isahmar Torres Melo / @Isahmar_Torres
Tras enfatizar que ni el dirigente estatal de Morena ni los legisladores electos cometieron ningún delito en el Grand Hotel M&M Puebla, el candidato a la gubernatura del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta, advirtió que no van a dejarse intimidar, y señaló que, de haber órdenes de aprehensión en su contra, que las ejecuten.
“No admitimos haber cometido algún delito, no admitimos haber violado la ley en el Hotel MM”, señaló de manera enfática Barbosa Huerta, quien acusó a las autoridades locales -al servicio del ex gobernador Rafael Moreno Valle- de quererlos intimidar a través de este tipo de actos, que advirtió, no van a permitir.
Refirió que estarán en constante comunicación con la dirigencia Nacional de Morena, y de acuerdo a ello, podrían ir a entregarse el dirigente estatal de Morena, Gabriel Biestro Medinilla, los senadores electos, Alejandro Armenta y Nancy de la Sierra, asi como los diputados electos José Juan Espinosa y Fernando Manzanilla, contra quienes la Fiscalía General del Estado habría solicitado órdenes de aprehensión.
“No tenemos miedo, si quieren encarcelarnos que nos encarcelen, pero ya las miradas a nivel nacional e internacional están fijadas en Puebla y el fraude que intenta consumar Moreno Valle”, comentó Barbosa, quien acusó al ex diputado Federal Eukid Castañón, y al dirigente estatal del PAN, Jesús Giles, así como a la responsable de comunicación de Martha Erika, Sandra Izcoa, de haber iniciado un proceso contra los morenistas.
Cabe la pena señalar que, la Fiscalía General del Estado, así como el Secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco, negaron que existiese tal orden de aprehensión, sin embargo, a manos de Biestro llegó un documento del Tribunal Superior de Justicia de Puebla donde consta que los panistas sí denunciaron a los morenista por los delitos de motín, privación ilegal de la libertad, lesiones calificadas y daño en propiedad ajena.
Gabriel Biestro relató que este martes se dirigía a una entrevista cuando recibió la notificación de una presunta orden de aprehensión en su contra, y sus abogados, al investigar, encontraron que ésta también era en contra de los legisladores, por lo que asegura, la amenaza es real, y pudieron haberla parado por el momento ante la mediatización del asunto.
