Una semana difícil

Por José Antonio de la Vega Moreno

Puebla no puede parecerse a Zacatecas, Morelia, Sinaloa, Guerrero, Morelos, Veracruz, la violencia cruenta en esos estados lacera y vulnera la tranquilidad de su sociedad.
Están alejados de la mano de Dios.
Lejos de las autoridades estatales y del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Están olvidados.
Puebla no puede ir hacía esos escenarios.
Aunque lamentable la violencia crece.
La descomposición social aumenta, sin duda.
Las familias se pierden, se dividen, con ello se descalcifica la estabilidad social.
La responsabilidad es de todos.
Ejemplos, varios.
Balacera en el mercado Miguel Hidalgo.
Tres ejecutados en pleno centro de Acatzingo, quien la haya escenificado, disputa entre bandas delincuenciales, crímen organizado, la escena a plena luz del día, aterroriza.
Cuerpos encontrados hasta en una tamalera en el municipio de Amozoc.
Robo a cuenta habientes. Asaltos al transporte público.
Protestas por encontrar a las y los desaparecidos.
A todo esto, el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuria (IDHIE) de la universidad IBERO Puebla, lanza datos, cifras preocupantes.
Retomó sus estadísticas: -cito- del uno de Julio de 2021 existen en el país por lo menos 220 mil 280 personas que han sido víctimas de desapariciones de las cuales de las cuales, cuatro de cada diez permanecen sin ser localizadas.
Puebla según el IDHIE aporta en ese mismo periodo 2882 personas. (cierro cita)
Las familias pelean solas, hay omisión, dilatación de respuesta por parte de las autoridades.
Que esto cambie para bien, es responsabilidad de todos, ya los padres y madres hacen su trabajo al frente del colectivo “Voz de los desaparecidos en Puebla”.
Ahora, las autoridades estatales y municipales que se sumen al alza de voz del gobernador del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta, comprometido a limpiar mercados, municipios como Acatzingo, de la delincuencia, además, Tecamachalco, Tepeaca, San Martín, Amozoc entre otros.
Que hombres y mujeres poblanas no se conviertan en una estadística más de desapariciones, ejecuciones y robos
Que no se tenga que gritar y escuchar nunca más en ningún espacio:
“Carpetas archivadas, mujeres asesinadas”.
Que así sea.