El presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, Néstor Camarillo Medina, confirmó que inició un proceso de destitución de su dirigente municipal en Puebla, Sebastián Hernández Orozco, luego de ser señalado por presunta violencia familiar.
Señaló que esta decisión se tomó, luego de que el propio priista rechazó el exhorto que se le hizo, respecto a separarse de su cargo como dirigente municipal, ante las acusaciones que tiene por parte de sus ex parejas.
Reiteró que como dirigente estatal del PRI, siempre respetará los derechos de las mujeres, por lo tanto, no permitirá que el partido sea acusado de ser cómplice de violentadores, que también se caracterizan por no pagar pensión alimenticia.
Adelantó que este viernes se podría reunir con el dirigente municipal Sebastián Hernández, pero reiteró que de manera personal está en el proceso de separarlo de su cargo ante los señalamientos citados.
“Ha iniciado ya un proceso de separación del cargo del partido, y lo vieron ustedes a través de un comunicado, que fue respetuoso porque también tiene sus derechos políticos, para pedirle o exhortarlo para la separación del cargo, así que ya lo hicimos de manera formal, pero hasta el momento no ha atendido el llamado y solamente en una comunicación vía WhatsApp me pidió hasta el día de mañana”.
