Puebla, estado donde más se discrimina a la comunidad LGBT+: CNDH

Foto: Isahmar Torres /@isahmar_torres


Pese a que en el estado de Puebla ya se ha logrado legalizar el matrimonio igualitario y el cambio legal de género, la homofobia persiste y ello se ve reflejado en los distintos ámbitos escolares, según revela el estudio “Violencia Escolar contra estudiantes LGBT de México”, realizado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

La investigación retoma el hecho de que, de acuerdo con la encuesta nacional de discriminación, ENADIS 2017, el estado de Puebla es en el que mayor discriminación prevalece por cuestiones de orientación sexual, y las instituciones educativas no han avanzado en garantizar los derechos de los integrantes de la comunidad LGBT.

“Generalmente se trata de violencia producida entre estudiantes, aunque también ocurre desde los docentes y otro tipo de personal que trabaja en las escuelas hacia ciertos estudiantes que son percibidos con orientación sexual y/o identidad de género diferentes al patrón cultural predominante”, refiere el estudio.

En este sentido, uno de los artículos que incluye la CNDH en su investigación refiere que en el Centro Escolar del Sur Manuel Bartlett Díaz (CECSur) prevalece la exclusión y discriminación a todo aquél que transgreda los objetivos de mantener los modelos heteronormativos.

“Recurrimos al concepto de violencia estructural ya que este nos permite
observar y analizar las prácticas discriminatorias a las cuales son sometidos aquellos sujetos que no actúan de manera coherente entre su cuerpo, su género y su deseo en el proceso del cortejo y que son estereotipados como gays, maricas, putos, tortilleras y lesbianas con la finalidad de excluirlos, de discriminarlos como sujetos
anormales, inferiores y prescindibles”, señala el artículo.

Asimismo, el estudio recopila diversos testimonios de jóvenes universitarios que señalan no protegidos por la BUAP para expresar con libertad sus preferencias sexuales, pues según relatan, los integrantes de la Dirección de Acompañamiento Universitario (DASU) vigilan cualquier comportamiento “fuera de lo normal”.

“La situación en la universidad es compleja, por un lado se asume que no existe la población LGBTTTIQ+ en la universidad o en todo caso que al ser minoría no son tan relevantes, en consecuencia no se cuentan con elementos estructurales que les den acompañamiento o seguimiento frente a situaciones de discriminación o violencia o bien quedan planteados de forma general”, señala la investigación.