Poesía, ruta de libertad en medio del Covid-19

Por: Abel Pérez Rojas

El confinamiento voluntario y las repercusiones nocivas provocadas por la pandemia del Covid-19 nos han orillado a un estado en el que pareciera que hemos transitado al aprisionamiento sin salida, porque muchos de nuestros planes y proyectos se vendrán abajo y nuestra vida ya no es la misma, sin embargo, en medio de todo este panorama, la poesía está representando una ruta de libertad.

En casi todo el mundo el confinamiento y la sana distancia fueron dos de las principales medidas para frenar la propagación del coronavirus.

El confinamiento sacó a la vista muchos de nuestros males que están latentes.

La ansiedad, el miedo, la apatía, la sensación acendrada de incertidumbre, la depresión y angustia han sido algunas de las repercusiones que más han dañado la salud mental de las personas.

La violencia intrafamiliar se disparó en muchos casos, pues se ha tenido que convivir más tiempo con quienes son los principales agresores de niños, mujeres y hombres.

Por otra parte, son innegables las averías ocasionadas a la economía de todos los bolsillos.

Muchos perdieron sus negocios y muchos más sus empleos.

Ni qué decir de las miles de muertes que no paran, aunque, ciertamente, ya varios países han logrado controlar el efecto letal de la pandemia.

Mientras todo esto nos está sacudiendo, la poesía –y por supuesto todas las artes-, significa una ruta de libertad.

Miles de poetas y no poetas han usado a la poesía como trampolín para escapar del aprisionamiento.

Por todas partes han surgido iniciativas y aportaciones para guarecerse en la fortaleza de las palabras y en los mundos que éstas generan.

Valdría la pena realizar una investigación profusa al respecto.

Aquí, sólo una pequeñísima muestra.

El poema luminoso de Yayoi Kusama, la famosa artista japonesa que vive recluida de forma voluntaria en un psiquiátrico. Las líneas fueron ampliamente divulgadas por los usuarios de las redes sociales.

La radio pública estadounidense NPR propuso a sus oyentes escribir un poema en forma comunitaria a partir de dos pinturas, una de Salvador Dalí y la otra de Kadir Nelson.

El festival #Poesíaenelsofá, creado por Elvira Sastre y Andrea Valbuena, en el cual, a través de Instagram han estado celebrando lecturas con destacados autores. En Uruguay se replicó la propuesta bajo el mismo hashtag.

El poema “You Clap For Me Now” (Ahora me aplaudes) de Darren James Smith, el cual fue declamado por médicos, enfermeras, taxistas, repartidores de comida, comerciantes, entre otros trabajadores esenciales, cuyo video se volvió viral con casi siete millones de reproducciones en el primer día de su publicación en Twitter.

La iniciativa “Poeta Nacional belga”, por la cual autores de ese país escriben poemas en memoria de los muertos acaecidos durante la pandemia. Los poemas son de uso libre y gratuito, por ello, cualquiera puede usarlos en memoria de algún familiar. La iniciativa es coordinada a través de tres asociaciones distintas.

En México la iniciativa #Poesíaalasocho gana cada vez más terreno, recientemente se adhirió la Academia Nacional de Literatura de México, entre otras asociaciones, colectivos, escritores, artistas y amantes de la poesía.

Van para largo los efectos nocivos causados por el Covid-19, pero lo cierto es que, cada vez más personas están encontrando en la poesía una ruta de libertad que es más visible en días aciagos como los que estamos viviendo.

Vale la pena darse cuenta. Vale la pena intentarlo.

Nos vemos la próxima semana, hasta entonces.