La BUAP vuelve a la normalidad 

Erick Becerra

La rectora de la BUAP, Lilia Cedillo Ramírez, sacó la casta y logró persuadir a los estudiantes paristas a entregar las instalaciones de CU para volver a la normalidad.

Este lunes, después de un fin de semana muy agitado, con la celebración de mesas de negociación, la rectora entró a CU, reabrieron puerta por puerta, recibió las llaves y volvió a su oficina.

Tras más de un mes de paro, la BUAP comenzará a tener una normalidad cotidiana.

Trabajarán a marchas forzadas para recuperar el tiempo perdido y para más o menos ponerse al corriente de todos los pendientes.

Está claro que Lilia Cedillo demostró que en la adversidad tiene los arrestos para garantizar la viabilidad política al interior de la Universidad.

Hay quienes especulan sobre el origen y las consecuencias del paro.

Pienso que la rectora saldrá fortalecida al interior y hacia afuera. De no haber conseguido la reapertura, quizá sí se habría complicado el futuro.

Sin embargo, las fortalezas académicas y científicas de la rectora se sumaron a las habilidades de su equipo que también se puso las pilas para resolver el conflicto.

Siempre, las personas crecen cuando enfrentan adversidades. Es una máxima de la vida. No tenía por qué ser diferente.

El paro dejará enseñanzas internas. La atención a las debilidades sobre todo administrativas seguramente será a parir de ahora, más asertiva.