El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, encabezó la Ceremonia Conmemorativa al Día Internacional del Trabajo; lo acompañaron titulares de dependencias y líderes sindicales.
En el uso de la palabra, el titular de la Secretaría del Trabajo, Gabriel Biestro Medinilla, expresó que, desde 2019, Puebla atraviesa por una época de cambio en todos los sentidos y aspectos, pese a que existen fuerzas necias que pretenden evitar el cause de esta transición.
“Hay aún mucho por hacer, pero también es cierto que mucho ha cambiado y el área laboral no es la excepción. Hoy se implementa un nuevo sistema de justicia laboral, hoy se habla de democracia y libertad sindical.
Hoy se piensa en nuevos mecanismos de selección de dirigencias, de legitimación de contratos (…). Hoy el salario mínimo ha aumentado más del 50 por ciento en estos últimos años, y se busca que para el siguiente vuelva a tener otro incremento significativo, así también como las pensiones”, agregó.
Biestro Medinilla añadió que actualmente también se busca que las pensiones tengan un repunte, además de modificar los periodos vacacionales en beneficio de la base trabajadora.
En su lectura, también hizo alusión a las afectaciones que dejó la pandemia en este sector, sin embargo, apuntó que hoy la entidad se recupera y revive en manos de un gobierno capaz.
“Recuerdo que el día que el gobernador Miguel Barbosa me dio el honor de designarme secretario del Trabajo, la indicación fue clara, tratar con todos los sectores no con uno solo, buscar las coincidencias y la armonía entre trabajadores y empleadores porque somos servidores de ambos, siempre con rectitud e imparcialidad”, rememorizó.
Asimismo, refirió que es necesaria abatir los actos de corrupción que podrían originarse.
“Tenemos que salir adelante pero es tarea de todos (…). No hay condiciones que justifiquen la amenaza, la violencia, el bloque, el chantaje o cualquier tipo de actividad ilegal para lograr un objetivo determinado”, advirtió.
Finalizó al decir que llegó la hora de dejar atrás los antiguos vicios y prácticas decrépitas que solo servían para mantener a un régimen corrupto y antidemocrático a costa de la dignidad de los trabajadores y agremiados.
