Maritza Mena
El escenario en 2022 se vislumbra complicado para las familias mexicanas, no sólo porque la pandemia por Covid_19 dificultó la economía para la mayoría de las personas por la pérdida de su empleo, el cierre de empresas o la reducción de ingresos por causa del confinamiento, sino porque las políticas económicas aún distan mucho de promover el desarrollo.
El año pasado, la mayoría legislativa, integrada por Morena y sus aliados en la Cámara de Diputados aprobó la miscelánea fiscal para 2022 que fija un aumento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), obliga a los mayores de 18 años a inscribirse al Régimen Federal de Contribuyentes (RFC) a pesar de que muchos de ellos no hayan iniciado su vida laboral, y limita la deducción de impuestos de personas físicas a través de donativos a organizaciones civiles, decisiones que difieren de beneficiar la economía familiar.
Ya de por sí la inflación registrada al cierre de 2021 que fue de 7.36 por ciento, la más elevada de los últimos 21 años, ha provocado que los mexicanos limiten la compra de alimentos o de algunos productos y servicios, las cargas impositivas complicarán más el poder adquisitivo. Aún sin este factor, ha existido una disminución de la clase media que podría ser importante en este año.
TResearch destaca que en dos años creció la clase baja, disminuyó la alta y también la media. Mientras en 2018 el porcentaje de hogares en México que pertenecía a la clase alta era de 2.2 por ciento, para 2020 fue de 1.2 por ciento, en el periodo de referencia la clase media pasó de 46.7 a 42.2 por ciento, finalmente la clase baja fue de 51.1 a 56.6 por ciento.
Los datos anteriores reflejan que la pandemia tuvo efectos negativos en la economía de todos los hogares mexicanos, que por desgracia, no pudieron contenerse ante la falta de apoyos gubernamentales para mantener el empleo y a flote a las empresas.
Aunado a ello, el Presupuesto de Egresos de 2022 ha sido calificado como transgresor del principio de progresividad y ha encontrado la oposición de la coalición Va por México con una acción de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Lo que los datos dejan ver es que podemos esperar un año 2022 mucho más complicado que el anterior, ya que además, la cuarta ola de la pandemia ha aumentado estrepitosamente el número de casos positivos, a pesar de los esfuerzos por llevar la vacunación a todos los rincones, porque la enfermedad supone gastos que muchas veces se tienen que solventar de manera particular.
@MaritzaMena7
