Emite Sergio Salomón su último Grito de Independencia; incluye la paz en todo el país

Foto: Alejandro Rodríguez

El gobernador del estado, Sergio Salomón Céspedes, emitió su último Grito de Independencia, en el Palacio Municipal, en el CCXIV Aniversario de la Independencia de México, en donde integró en la Arenga por la paz de todo el país y por la familia poblana.

Fue después de las 23:00 horas cuando el gobernador del estado, en compañía de su esposa, Gabriela Bonilla, salió al principal balcón del Palacio Municipal para emitir el Grito.

¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla!, ¡Viva José María Morelos y Pavón!, ¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!, ¡Viva Leona Vicario!, ¡Viva Allende!, ¡Viva Aldama!, ¡Viva Guerrero y Victoria!, ¡Qué vivan los héroes poblanos anónimos que forjaron nuestra historia!, ¡Viva las cuatro veces heróica de Zaragoza!, ¡Qué viva el humanismo mexicano!, ¡Los pueblos originarios y nuestro pasado prehispánico!, ¡Qué viva la paz en todo nuestro país!, ¡Viva la gran familia poblana!, ¡Viva Puebla, Viva México, Viva México, Viva México!

 Tras la Arenga, el gobernador tocó la campana por varias veces, luego la banda musical de la policía municipal tocó el himno nacional.

Al ritmo de Qué Chula es Puebla, comenzó el espectáculo de pirotécnica, el cual duró más de 10 minutos.

Ante esto, las personas no dejaron de aplaudir, por lo que el rostro de miles de personas revivieron el orgullo de ser mexicanos.

A este evento también asistió el presidente municipal electo, José Chedraui Budib, quien también salió a uno de los balcones para saludar a la gente.

A mitad del espectáculo de pirotécnica, el presidente municipal, Adán Domínguez Sánchez, y su esposa Claudia Barrientos Hernández, salieron para disfrutar del espectáculo de fuegos pirotécnicos en el balcón principal.

Al concluir, este espectáculo, la gente disfrutó del concierto de la cantante Majo Aguilar por una hora.

La gente disfrutó de la Verbena popular en avenida Reforma 

Mientras tanto, otras personas disfrutaron de la verbena popular en la Avenida Reforma con los tradicionales antojitos mexicanos.
Asimismo, algunos asistentes portaron trajes típicos, e incluso en el Zócalo una persona llegó con una máscara de luchador, un sombrero de charro y un sarape color negro. El primer cuadro de la ciudad estuvo blindado por policía municipal y estatal.