Carlos Gómez / @gomezcarlos79
Un rotundo fracaso quedó evidenciado ayer en materia de seguridad en el transporte público de Puebla.
La cifra de concesiones que operan legalmente en el transporte público es de 36 mil y sólo 400 cumplen con las cámaras de seguridad, los botones de pánico y los GPS.
El único responsable de este enorme fracaso es el ex secretario de Movilidad y Transporte, Guillermo Aréchiga, quien actualmente está preso por otorgar de manera ilegal concesiones en su paso por el gobierno de Miguel Barbosa.
Ayer en la conferencia de prensa de Elsa Bracamonte González se dieron detalles del brutal fracaso del programa que afecta a miles de usuarios del transporte público que todos los días tienen que padecer de las pésimas condiciones de las unidades, los asaltos y la falta de condiciones de seguridad.
El gobernador Miguel Barbosa confía plenamente en que Elsa Bracamonte tenga la capacidad de poder sacar adelante este programa porque es un compromiso que hizo su Gobierno con la sociedad al aumentar la tarifa del transporte público.
Lamentablemente no se ven las acciones necesarias aún para obligar a los transportistas a cumplir su palabra, modernizar las unidades del transporte público, colocar las cámaras, los botones de pánico y los GPS.
El reto es enorme, pero es urgente que las autoridades estatales metan en cintura a los 35 mil 600 concesionarios que aún no cumplen con lo que prometieron.
De lo contrario, seguirán las pésimas unidades del transporte público y los interminables asaltos a los usuarios.
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