Enrique Doger Guerrero enfrenta un serio dilema sobre su futuro político: pelear hasta el final la candidatura a la gubernatura o resignarse para buscar nuevamente la Presidencia Municipal de Puebla.
Vamos analizar algunos factores que no deben perderse de vista en estos momentos en que está por definirse la candidatura del PRI a la gubernatura de Puebla -y que este 25 de enero podría aclararse durante la reunión que sostendrán Enrique Doger y Jorge Estefan Chidiac-.
En primer lugar, en caso de que el PRI le niegue la candidatura a la gubernatura de Puebla sería la tercera vez en que es marginado: en 2010 fue ante Javier López Zavala y en 2016 con Blanca Alcalá Ruiz.
En público y privado el ex delegado del IMSS ha dicho que su objetivo es la candidatura del PRI a la gubernatura de Puebla.
Eso lo tiene en la mente desde que fue presidente municipal de Puebla y que durante dos procesos internos del PRI le han negado.
En segundo lugar está su posición en las encuestas, debido a que es el priista mejor posicionado en el estado.
Ningún priista tiene los números de Enrique Doger y queda claro que si el PRI le niega la candidatura entonces se confirmará que la elección está pactada a favor del PAN.
No hay otra lectura.
El Comité Ejecutivo Nacional del PRI ha dado claras muestras de que no le interesa ganar la elección en Puebla.
La dirigencia nacional no hizo la alianza con el PANAL y el PVEM en Puebla.
No le da la seriedad que merecen personajes como Juan Carlos Lastiri, Jorge Estefan Chidiac y el propio Enrique Doger.
A los tres les han hecho creer que tienen serias posibilidades de obtener la candidatura pero a los cinco minutos cambian de opinión.
La falta de seriedad del CEN del PRI deberá ser bien valorada por el propio Enrique Doger, debido a que está claro que no quieren competir para ganar. Es más, ni van a competir.
La opción de aceptar la candidatura a la Presidencia Municipal de Puebla no es lo ideal para Enrique Doger.
Sin embargo, ante el evidente pacto entre el PRI y PAN para perder la gubernatura, quizá no sea tan mala opción para Enrique Doger.
Enrique Doger tendría más posibilidades de ganar la Presidencia Municipal de Puebla solo, sin el PRI y sin los traidores del CEN.
En una de esas, el morenovallismo hace un juego de dos bandas y hace perder a Eduardo Rivera para darle el triunfo a Enrique Doger, con todo los riesgos que eso implica.
Aunque está claro que Martha Erika Alonso necesita garantizar el triunfo del PAN en la capital poblana con Eduardo Rivera para aumentar sus posibilidades de triunfo ante Miguel Barbosa.
Enrique Doger pronto deberá tomar una decisión.
La que tome no será fácil.
Si le dan la candidatura a la gubernatura corre el enorme riesgo de ser sacrificado por el CEN por el pacto que tienen con el PAN.
Si acepta la candidatura a la Presidencia Municipal dependerá de sus propios recursos y capacidades dar la sorpresa, sin que se tenga certeza del resultado.
Pronto sabremos la respuesta.
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