Jesús Lemus/@chucho_lemus1
Don Felipe, el estudiante de ingeniería más viejo de la BUAP, se solidarizó con los miles de universitarios que este jueves marcharon por las calles de Puebla, para exigir justicia en favor de los tres estudiantes que junto con un chofer de UBER, perdieron la vida tras el Carnaval de Huejotzingo.
Las pequeñas arrugas en su rostro de piel morena y su bastón que lo ayudaron a caminar por las calles de Puebla, demostraron que sus 83 años no son limitantes para exigir justicia en favor de su compañero de universidad, Francisco Javier Tirado, quien era estudiante de medicina en la BUAP.
En su cuello resalta un paliacate rojo, que por momentos se quita para limpiarse el sudor que se generó por el sol a plomo que azotó a la ciudad de Puebla, donde ningún estudiante desertó durante la marcha que según organizadores, tuvo unos 150 mil participantes.
Va a paso lento pero seguro. En su trayecto a Casa Aguayo realiza pequeñas pausas, no son por cansancio, sino para recoger la basura que se queda en el camino a raíz de esta fuerte movilización.
Su costal se empieza a llenar poco a poco de basura y aunque casi está a tope, Don Felipe, estudiante de Ingeniería en Procesos y Gestión Industrial de la BUAP en San José Chiapa, no se detiene hasta cumplir con su misión: llegar con el gobernador Miguel Barbosa para clamar justicia en favor de las víctimas.
