José Antonio de la Vega Moreno / @Tono_delaVega
En lo que va del año la entidad poblana se acerca a los cien feminicidios tras los últimos dos cadáveres de mujeres encontradas en el municipio de Acajete.
El primer hallazgo realizado por los habitantes del lugar, fue el de una mujer cerca del basurero de la comunidad de Tepetzala.
La segunda, con el cuerpo completamente calcinado dentro de una unidad automotriz en las mismas condiciones, pero ubicada en las inmediaciones de San Jerónimo Ocotitlán.
Si hacemos cuentas, los feminicidios, asesinatos o muertes de mujeres en Puebla –como quieran llamarle las autoridades- alcanzan la cifra de 8 mujeres asesinadas por mes en
este 2020 y aún no concluye.
Es mucho, es poco, no lo sé.
Lo que sabemos es que seguimos siendo una sociedad vulnerable, indefensa, desvalida y susceptible a cualquier tipo de delito: robo, asalto, atraco, secuestro, asesinato, cobro de piso, trata de blancas, violencia intrafamiliar, violencia de género, crímenes de odio y desde luego feminicidios.
Paren esta ola de delitos.
Aunque cifras oficiales, marcan una tendencia a la baja en algunos delitos, hay que reconocer que falta mucho por hacer.
A pregunta suelta que realicé a mi amiga y reconocida Consultora poblana, Edurne Ochoa ¿Sirve de algo el Día Naranja?
De inmediato respondió “No, es solo un figurín político que sirve para lavarse la cara y pretender que la vida de las mujeres les importa.
Contundente.
Como sociedad todos debemos hacer desde nuestras trincheras el trabajo pertinente para prevenir y apoyar a todas las mujeres poblanas.
Ni una más o ni una menos como dicen slogans de carteles de mujeres y hombres protestando en las calles y frente a dependencias para demandar frenar la violencia contra la mujer o pidiendo justicia por sus muertes.
Las autoridades poblanas tendrán que redoblar su esfuerzo y revisar la posible modificación de protocolos para el trabajo de inmediato tras la denuncia de una desaparición.
Estamos llegando al fin del atípico año 2020 con la posibilidad de rebasar o por lo menos alcanzar la cifra de los cien feminicidios en Puebla.
A qué número llegaremos el próximo 25 de diciembre.
El próximo Día Naranja.
Ese naranja, hay que evitar se tiña de rojo.
Es tiempo de hacer algo y pronto por parte de las autoridades gubernamentales, principalmente de la Fiscalía General del Estado.
Ahí están los cuerpos de 98 mujeres que así lo sugieren.
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El “pastelero” del PAN.
El secretario de Fortalecimiento Interno del Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional, José Sánchez Aguilar, se ha ganado el mote del “pastelero”.
Claro, con la consabida razón de que no nada más quiere comerse la cereza, sino todo el pastel.
Pues existen presuntas pruebas donde ejecuta venta de candidaturas que van desde los cien mil hasta el millón de pesos por una presidencia municipal en el interior de la capital
poblana.
El “pastelero” Sánchez Aguilar, quien por cierto, trabajó muy de cerca a Eukid Castañón, también ofrece favores y amarres políticos.
Para los que han caído en sus manos, presumen que en próximos días podría verse inmerso este personaje en serios problemas.
Pues ya amagan aquellos a los que prometió un intercambio, compra o venta de presumibles candidaturas llegar a hacerlo público al propio Comité Directivo Estatal del PAN.
Sánchez Aguilar el de la cartera de Fortalecimiento Interno, podría quedar endeble ante presuntas pruebas en su contra.
Este personaje, habría pensado, para qué comerme la cereza, si me puedo comer todo el pastel.
Ojalá no se le indigeste su gestión.
