Carlos Gómez / @gomezcarlos79
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) no se cansa de hacer el ridículo y de desplomarse en Puebla y el Partido Acción Nacional (PAN) anda en las mismas.
Ayer, Mario Olvera, su candidato a la Presidencia Municipal de Chignahuapan renunció a sus aspiraciones y se sumó públicamente al candidato de Morena, Juan Rivera Trejo.
Además, se declaró leal al proyecto de la Cuarta Transformación y del gobernador, Alejandro Armenta.
Este error debe atribuirse al senador y líder estatal del PRI, Néstor Camarillo, quien tuvo el tiempo suficiente para poder elegir a un verdadero militante priista y no a un ex militante del PAN.
Aunque el escenario de violencia en las elecciones extraordinarias de ese municipio es real, el líder del PRI tuvo el tiempo suficiente de prever tal situación y designar un perfil distinto.
Queda claro que Morena aventaja en las encuestas para ganar este municipio en las elecciones extraordinarias del próximo domingo y todo indica que Mario Olvera selló la victoria de manera anticipada.
Este caso debe ser un ejemplo para Néstor Camarillo y para el líder estatal del PAN, Mario Riestra, debido a que muchos de sus potenciales candidatos para el 2027 no dudarán en sumarse a Morena en plena campaña.
Néstor Camarillo y Mario Riestra deben elegir a perfiles leales al PRI y PAN o de lo contrario Morena volverá arrasar en las elecciones intermedias del 2027.
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Tal y como se adelantó en este espacio, Dulce María Reyes Quiroz se convirtió en la directora del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Texmelucan.
La diputada local suplente logró su objetivo y cuentan que tiene toda la capacidad para sacar adelante la encomienda.
Ante el desastre del gobierno del alcalde, Juan Manuel Alonso, y por el bien de Texmelucan, ojalá Dulce María Reyes haga un buen papel.
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