Carlos Gómez / @gomezcarlos79
La falta de experiencia, la ansiedad y la ambición por los millonarios ingresos sin comprobar que se manejan en el COBAEP, provocaron que Víctor Manuel Cruz Verdín cayera en la trampa del aún director, José Luis Nájera Muñoz.
Hubo dos factores para la torpeza cometida por Víctor Manuel Cruz al requerir una reunión del proceso de entrega – recepción: primero lo hizo fuera de tiempo y sin cuidar las formas con una actitud gandalla (dicen que los abogados y asesores de Cruz Verdín ya se estaban repartiendo oficinas) y, segundo, la trampa que le tendió José Luis Nájera.
Le voy a explicar.
El sequito de abogados y asesores de Víctor Manuel Cruz llegó la semana pasada con una actitud arrogante para entregar un oficio para exigir una reunión para el lunes 9 de septiembre.
Obviamente los mandaron a la Oficialía de Partes del COBAEP y ahí sacaron copias al documento que después se filtró a la prensa y nuestro compañero columnista Carlos Macías Palma la dio a conocer.
Es decir, le tendió una trampa al recibir ese “oficio” que el propio Nájera Muñoz sabía que no era procedente, pero se hizo público para exhibir a Cruz Verdín como un ambicioso y “gandalla”, junto con sus abogados y asesores.
Y, desde luego, que esa filtración provocó que reconsidere el nombramiento de Víctor Manuel Cruz por parte del equipo del gobernador electo, Alejandro Armenta, como lo señaló la periodista Viridiana Lozano.
Está claro que el equipo de Alejandro Armenta reprobó la actitud de Víctor Manuel Cruz y su relevo del cargo sería una señal clara y contundente de que no se van a permitir a los “gandallas y ambiciosos”.
Y ese mensaje sería para todos los del equipo de Alejandro Armenta.
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