17 años de autoayuda y compromiso social; la historia de ‘Casta de Guerreros’

Por José Manuel Trinidad Corona

La historia de los grupos de autoayuda suele ser una de esas batallas que rara vez aparecen en los reflectores, pero que, sin duda, transforman vidas. Tal es el caso de “Casta de Guerreros”, una fraternidad que desde hace 17 años ha mantenido firme su compromiso: luchar contra las adicciones y acompañar a quienes enfrentan la enfermedad emocional.

No es casualidad que el trabajo de estos grupos se sostenga en la lealtad y en la convicción de servir. Sus integrantes no buscan reconocimiento ni retribuciones económicas; su recompensa es otra: ver a hombres y mujeres levantarse del abismo y reencontrar sentido en sus vidas. En un entorno social donde la prevención suele ser ignorada, estas trincheras de esperanza representan un verdadero contrapeso.

El esfuerzo de personas como Fermín, Levy, Reyes, Maricarmen, Teresa y, más recientemente, Héctor, ha sido vital para extender el mensaje en distintas regiones de Puebla, especialmente en el norte de la capital. Ellos han replicado, con disciplina y fe, el modelo de Alcohólicos Anónimos, pero con un sello propio: la espiritualidad y la cercanía comunitaria.

En tiempos en los que la violencia y la descomposición social parecen dominar la agenda, resulta indispensable reconocer el valor de quienes, desde la discreción, impulsan programas de prevención, escucha y acompañamiento. Porque la lucha contra las adicciones no se gana en un laboratorio ni en una oficina gubernamental: se libra en la calle, en los centros comunitarios, en las reuniones nocturnas donde alguien comparte su testimonio para salvar a otro.

Hoy, “Casta de Guerreros” celebra 17 años. No se trata solo de una cifra, sino de una señal clara de resistencia. Su legado es simple y poderoso: la autoayuda puede ser el camino más humano y cercano para sanar heridas que la sociedad suele esconder.

Y la lucha continuará: en marzo de 2026, Puebla será sede del congreso “Rompiendo Cadenas”, un espacio donde los esfuerzos de prevención, superación y autoayuda se consolidarán, reforzando la red de apoyo y ofreciendo herramientas a quienes buscan romper con las adicciones y reconstruir sus vidas.