Tristes e indignados familiares sepultaron a hermanos asesinados en Canoa (video)

Odilón Larios Nava / @odylarios

En medio de múltiples muestras de cariño, tristeza, pero además tradición y colorido, así fue como despidieron a los hermanos que fueron asesinados el pasado viernes por la madrugada durante un asalto a casa habitación en San Miguel Canoa, Puebla.
El cortejo fúnebre que acompañó a los hermanos Fernando Patricio Marcial y Erón Noé, ambos de apellidos Pérez Arce, de 23 y 30 años, respectivamente, partió de su domicilio alrededor de las 13:30 horas de este lunes, para dirigirse a la iglesia de la citada junta auxiliar y posteriormente al panteón de aquella comunidad, para ser sepultados.
El cortejo estuvo teñido con flores blancas y rojas. El rojo porque el mayor de los hermanos era casado, y blancas porque el otro era soltero. Además, lucieron mucho los arreglos de carrizo, con flores, los cuales eran llevados por mujeres y hombres en gran número, además de las tradicionales coronas, cruces y ramos florales.
El cortejo fue acompañado por música de mariachi, y mientras avanzaban se lanzaban cohetes al aire, los cuales sonaban estruendosos y señalaban el avanzar de la procesión que acompañaba los féretros de los dos hermanos.
Los cuerpos recibieron misa en la iglesia de Canoa y después fueron llevados al campo santo donde fueron inhumados y donde descansarán por la eternidad.

EL DOBLE HOMICIDIO
Como se informó en este diario, el pasado viernes por la madrugada, un comando armado, con los rostros cubiertos con capuchas y portando armas largas de grueso calibre, ingresó al domicilio de la familia que se dedica al ramo de la construcción.
Sometió a todos los integrantes y les exigieron que entregaran el dinero. Lograron llevarse 3 millones 400 mil pesos, pero los bandidos, no conformes con el dinero, abrieron fuego en contra de los dos hermanos y los privaron de la vida. A uno de ellos le dieron 19 balazos, al otro 6.
Ante este atroz crimen, la familia exige a las autoridades el esclarecimiento del mismo y la captura de los ladrones y homicidas.
Cabe señalar que en reacción el pueblo de Canoa, se reunió ese mismo día por la noche y acordaron la formación de la Policía Comunitaria, esto ante la falta de vigilancia policial.