Reprobable la violencia electoral generada por el PAN y Morena

Carlos Gómez /@gomezcarlos79
Foto: Melanie Isahmar Torres Melo / @Isahmar_Torres

La violencia no puede, ni debe ser justificada de ninguna manera.
Es absolutamente reprobable lo ocurrido el pasado 1 de julio durante las elecciones con las balaceras y los disturbios y, desde luego, la conducta violenta de los simpatizantes de Morena que irrumpieron en el Hotel MM.
El PAN y Morena han convertido a Puebla en el mayor cochinero electoral y el estado más violento por los comicios en todo el país.
Los dos partidos han tomado la violencia como el único camino para llegar a la gubernatura de Puebla.
Los poblanos son rehenes de estos dos partidos políticos que pelean con los puños y con las armas el poder.
¿Merecemos esto los poblanos?
En serio los militantes del PAN y Morena no son capaces de respetar la voluntad ciudadana, de dialogar y respetar a las instituciones locales y federales.
¿Para qué queremos entonces a las instituciones?
Queda claro que el PAN y Morena ya las mandaron al diablo, como lo propuso Andrés Manuel López Obrador en el 2006.
El PAN usó descaradamente todo el aparato gubernamental el pasado domingo para generar un clima de pánico entre los votantes a través de las balaceras y los disturbios.
Y Morena despertó al tigre y los demonios que habían advertido en caso de un fraude contra Andrés Manuel López Obrador.
En el debate presidencial el propio López Obrador ofreció “abrazos y no balazos”.
Sin embargo, sus simpatizantes en Puebla olvidaron la frase y despertaron al tigre para defender lo que ellos consideran un fraude electoral.
Morena tiene el reto de demostrar que hubo un fraude electoral en Puebla pero por la vía legal y no por la violencia.
No será con golpes como revierta los resultados ya que deben recurrir a las instancias locales y federales.
Por el bien de los poblanos no debe haber más violencia.
Puebla no merece a la clase política que disputa el poder.
El PAN y Morena han demostrado que no están a la altura de un estado como lo es Puebla.
Ya veremos qué hace Andrés Manuel López Obrador para calmar Puebla y evitar que la violencia siga en aumento.
Estamos a nada de que todo se salga de control.
Está a la vista la ingobernabilidad en nuestro estado.
Estamos a un paso de arreglar todo a golpes y balazos.
¿Quién ganará?
¿El partido que tenga menos muertos?
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gomezcarlos79@gmail.com