Carlos Gómez / @gomezcarlos79
Morena en Puebla vive un ruptura interna muy evidente que ya venía desde antes de la selección de candidatos a puestos de elección popular y que hoy que la mayoría tienen cargos de elección asegurados se ha incrementado porque todos piensan en el 2024.
En un principio había un bloque entre Rodrigo Abdala y Gabriel Biestro contra Miguel Barbosa, José Juan Espinosa y Alejandro Armenta.
Entre ellos se vivió una intensa disputa por la candidatura a la gubernatura de Puebla que finalmente se quedó en manos de Miguel Barbosa.
Durante la campaña electoral fue claro que Gabriel Biestro cambió de aliado y abandonó a Rodrigo Abdala para unirse de lleno con Miguel Barbosa –quien ya lo designó como el próximo coordinador de diputados locales.
En un segundo grupo quedó el senador electo, Alejandro Armenta, quien tiene claro interés de convertirse en el 2024 en el candidato de Morena a la gubernatura de Puebla y tiene claras diferencias con Miguel Barbosa, Gabriel Biestro y Rodrigo Abdala.
En un tercer bloque está el próximo coordinador del Gobierno Federal, Rodrigo Abdala, y cuyo poder político y económico lo convertirá en un auténtico gobernador paralelo.
Nada se moverá y nada se autorizará sin el aval de Rodrigo Abdala, quien también se perfila para competir por la candidatura de Morena a la gubernatura en el 2024.
En un cuarto bloque estará el diputado local electo, José Juan Espinosa, y su esposa la senadora electa, Nancy de la Sierra.
Desde hace mucho tiempo hay un pleito muy marcado entre José Juan Espinosa y Gabriel Biestro e inevitablemente aumentará cuando empiecen funciones en el Congreso del Estado.
Aunque Gabriel Biestro sea el coordinador de los diputados, en la práctica José Juan Espinosa será el líder moral de la bancada morenista.
Y también José Juan Espinosa está en la lista de los interesados en competir por la gubernatura en el 2024.
Y en un quinto bloque estará la presidenta municipal electa, Claudia Rivera Vivanco.
En un principio tenía una buena cercanía con Gabriel Biestro pero la relación cambió durante la campaña y Claudia Rivera ganó la capital prácticamente sin el apoyo de la dirigencia estatal y muy alejada de la campaña de Miguel Barbosa.
En pocas palabras, no le debe nada a nadie,
Y si ella hace un buen gobierno en la capital será una de las principales figuras de Morena para buscar la reelección en el municipio de Puebla y después pensar en el 2024.
Por eso en estos momentos no hay unidad en Morena.
Cada uno de los actores mencionados ya piensa en el 2024.
Por eso han dejado casi solo a Miguel Barbosa en su lucha legal y política.
El 2024 ya pasa por su mente.
Morena está dividida en Puebla
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